Logo Don Galan. Revista Audiovisual de Investigación Teatral
imagen de fondo 1
imagen de fondo 2

PortadaespacioSumario

NúM 6
7. RESEÑAS BIBLIOGRÁFICAS
Logo Sección


7.2 · DUBATTI, Jorge, Filosofía del teatro, III. El teatro de los muertos. Buenos Aires, Atuel, 2014, 230 pp.


Robert March
 

 

Portada del libro


DUBATTI, Jorge, Filosofía del teatro, III. El teatro de los muertos. Buenos Aires, Atuel, 2014, 230 pp.

Robert March
Universitat de València


Filosofía del Teatro III. El teatro de los muertos es la tercera y última entrega que Jorge Dubatti dedica al campo de la Filosofía Teatral. Si recordamos, en su primer volumen, Filosofía del Teatro I. Convivio, experiencia y subjetividad (2007), el investigador argentino centraba su atención en el convivio teatral (cum panis), el lugar donde la experiencia del ser se reúne para habitar lo múltiple o, tal y como nos recuerda Eduardo del Estal ‒filósofo, pensador y buen conocedor de la teoría de Dubatti‒ en el prólogo de Filosofía del Teatro II, el lugar donde el pensar, quizás con un guiño a la poética de Juarroz, se torna experiencia. Y es que, según Del Estal, el modo en el que Jorge Dubatti piensa y filosofa el teatro “teatraliza al Pensamiento mismo”. Y ese convivio, esa intersección, no es sino un lugar en movimiento, el lugar de una llamada, de un mordisco más bien, o un desplazamiento en el sentido que escribe Ortega en La idea del teatro. Es decir, el lugar al que hay que desplazarse –el teatro‒ para ser y formar parte del encuentro –del convivio‒, de la no anticipación, pero no de lo que es, sino de lo que está, pues en teatro y, concretamente, para la Filosofía Teatral, afirma Del Estal, “lo que es, ante todo está”.  Y en el pensamiento que Jorge Dubatti ha desarrollado, ese estar remite, al menos, así lo entendemos, a dos caminos, a una encrucijada, a una posición: la de estar en el teatro, y la de teorizar sobre los lindes del pensamiento, sobre las poéticas de los afueras ‒los límites mismos‒, la exterioridad: su estar.

Asimismo, en Filosofía del Teatro II. Cuerpo poético y función ontológica (2010) el profesor argentino avanzaba su investigación, entre otras, en los diferentes niveles de la poiésis, pero también en unas nociones que, para el análisis teatral, partían de la existencia de una pre-semiótica. De este modo, Dubatti retomaba algunos de los postulados esbozados en manuales fundamentales como Cartografía teatral. Introducción al teatro comparado (2008) y Concepciones de teatro, poéticas teatrales y bases epistemológicas (2009). Si en el primero, Dubatti nos presentaba el teatro como observatorio, como lugar y mirador de fantasmagorías, la intención no era otra, entendemos, que la defensa del teatro como Acontecimiento, como reunión de los cuerpos en el aquí y el ahora, el intercambio de vivencias donde cabe lo invisible, la visión artaudiana de lo real para que lo poético –y lo subjetivo‒ “se ponga a nacer”: acontezca. En el segundo, en cambio, la apuesta –e insistencia‒ de Dubatti es la de la lectura del teatro, la historia del teatro, como historia de lo perdido; el hecho de regresar al teatro del no-saber o, en otras palabras, el vivir la pregunta ‒el teatro como pregunta, como misterio. De este modo, a partir de toda una trayectoria investigadora dedicada al estudio del teatro desde la vertiente de la Filosofía Teatral, Jorge Dubatti cierra su trilogía con Filosofía del teatro III. El teatro de los muertos.

En este volumen, Dubatti despliega toda una serie de mapas −de coordenadas− alrededor del encuentro teatral. Dibuja una teoría con la que aproximarnos, más si cabe, al análisis de dicho Acontecimiento, pero para ello, para tal acercamiento, el investigador argentino parte de una conciencia de duelo donde, como podemos imaginar, éste –el Acontecimiento‒ y la Filosofía Teatral van de la mano, se abrazan. Sin embargo, si tal caricia es posible lo es en la medida en la que la Historia del Teatro sea leída, tal y como señalábamos más arriba, como la historia de lo perdido.

No obstante, nada tiene que ver dicha pérdida con el olvido, más bien al contrario, pues si decimos que el objetivo de la Filosofía Teatral es el estudio del Acontecimiento, también es el de producir conocimiento, digamos, en los mayores espesores posibles. Ahora bien, para ello, lector/espectador/investigador tendrán que asumir que, en su explicitación, siempre habrá algo que se escape. No hablamos de la experiencia poética que acontece en el encuentro, sino, como ocurre en la traducción –en la mirada del traductor benjaminiano‒, de la imposibilidad de establecer un relato final −definitivo‒. Para Jorge Dubatti, y no podemos estar sino de acuerdo, el Acontecimiento no se hilvana con lo dicho ‒o sólo en su aproximación, en su balbuceo‒, sino con lo sentido, con los muertos que, parafraseando el título de un artículo del autor argentino, regresan para ser leídos.

Y es que Jorge Dubatti nos invita a asumir la perdida para que desde/con/a partir de ella nos dejemos afectar por una nueva poética, por un nuevo acto. En esta línea, de gran interés son los corolarios que se nos presentan a lo largo de este tercer volumen, desde la introducción, “Pensamiento teatral cartografiado, razón pragmática, pregunta epistempológica”, hasta la recapitulación y nuevos apuntes, como es el caso, por ejemplo, del capítulo que lleva por título “Teatro/Arte, Ciencias del Teatro/del Arte y Epistemología”, pero también el de “El artista-investigador, el investigador artista, el artista y el investigador asociados, el investigador participativo: Filosofía de la Praxis Teatral”. De hecho, en este último, Dubatti nos ofrece unos planteamientos alrededor de las nociones de presencia y ausencia para la escena. Asimismo, interesante es la reflexión en torno al binomio investigación-creación a la que, además, cabe sumar el sinfín número de referencias que Filosofía del Teatro III dedica a dramaturgos, pensadores y filósofos, de los que quisiéramos destacar los trabajos de Jean Allouch e Ileana Diéguez, concretamente, sus miradas en torno al duelo, y, muy especialmente, la de Adriana  Musitano, concretamente, su trabajo Poéticas de lo cadavérico.

Finalmente, de gran interés resulta el capítulo “El teatro de los muertos: teatro perdido, duelo, memoria del teatro. Problemas epistemológicos”. Es en éste donde, a nuestro entender, se encuentra el meollo del libro, pues desde estas páginas Jorge Dubatti termina por evocarnos la tarea del teatro, que es también la de la Filosofía Teatral: la de repensar el teatro a sabiendas que éste no puede ser totalmente pensado, ya que, como cita Jorge Dubatti a partir del dramaturgo Mauricio Kartun, “el teatro teatra”. Filosofía del Teatro III. El teatro de los muertos se acompaña de un prólogo de Guillermo Heras. Este manual ‒y sus partes anteriores‒ se nos presenta como un libro imprescindible tanto para el investigador especialista como para el público en general que quiera adentrarse en la aventura teórica teatral y, por qué no, en la de dejarse leer por el teatro.

 

 

espacio en blanco

Logo Ministerio de Cultura. INAEM
Logo CDT



Don Galán. Revista audiovisual de investigación teatral. | cdt@inaem.mecd.es | ISSN: 2174-713X | NIPO: 035-16-084-2
2016 Centro de Documentación Teatral. INAEM. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. Gobierno de España. | Diseño Web: Toma10

Inicio    |    Consejo de Redacción    |    Comité Científico    |    Normas de Publicación    |    Contacto    |    Enlaces